En la mitología griega, Afrodita (en griego antiguo Ἀφροδίτη) es la diosa del amor, la lujuria, la belleza y la sexualidad. Aunque a menudo se alude a ella en la cultura moderna como «la diosa del amor», es importante señalar que no era el amor en el sentido cristiano o romántico, sino específicamente Eros (atracción física o sexual). Su equivalente romana es la diosa Venus.

La ‘surgida de la espuma’ Afrodita nació de la espuma del mar cerca de Pafos (Chipre) después de que Crono cortase durante la Titanomaquia los genitales a Urano con una hoz adamantina y los arrojase al mar. En su Teogonía, Hesíodo cuenta que los genitales «fueron luego llevados por el piélago durante mucho tiempo. A su alrededor surgía del miembro inmortal una blanca espuma y en medio de ella nació una doncella» ya adulta, por esto es conocida también como Filomnedes. Por esto, Afrodita es de una generación anterior a la de Zeus y la mayor de los dioses olímpicos. Algunos autores consideran que de esta forma su madre sería Talasa, la personificación femenina del mar.


Afrodita no tuvo infancia: en todas las imágenes y referencias nació adulta, núbil, infinitamente deseable. En muchos de los mitos menores tardíos en los que participa aparece vanidosa, malhumorada y susceptible. Aunque es uno de los pocos dioses del panteón griego realmente casados, le es infiel a su marido con frecuencia. Hefesto, por supuesto, es una de las deidades helénicas más ecuánimes, y Afrodita parece preferir a Ares, el voluble dios de la guerra. En La Ilíada de Homero Afrodita interviene en la batalla para salvar a su hijo, Eneas, pero le abandona (de hecho, le deja caer mientras vuela por el aire) cuando la hieren, como también hace Ares. Es además la causante original de la propia Guerra de Troya: no sólo inició todo el conflicto al ofrecerle Helena de Troya a Paris, sino que el rapto se llevó a cabo cuando Paris, al ver a Helena por primera vez, fue abrumado por el deseo de poseerla, lo que corresponde a la esfera de Afrodita. Su dominio puede incluir el amor, pero no incluye el romance, tendiendo más bien hacia la lujuria, el deseo irracional humano.

Descendencia:
• Ares:
Anteros, Deimos, Eros, Fobos, Amonía, Hímero.
• Dioniso:
Himeneo, Príapo.
• Hefesto.
• Hermes:
Eros, Hermafrodito, Peito, Rodos, Tique.
1 comentario:
esta en su punto y muy original y muy bien escrito.
Publicar un comentario